De José Miguel Mendiola García, que ha tomado posesión este jueves como consejero del Consejo Consultivo, ha destacado su "espíritu claramente conciliador", y se ha mostrado convencido de que aportará a este órgano un planteamiento de "intentar resolver las cosas por las buenas".
"Es importante que el Consejo no genere ningún tipo de ruido", ha señalado García-Page, quien ha asegurado que éste es un órgano que corrige a la administración "muchas cosas", aunque --ha advertido-- "son muy pocas en proporción a la cantidad de decisiones que tomamos". "Cada consejo razonable y que se asume desde la administración con humildad --ha apuntado el presidente regional-- termina evitando conflictos jurídicos, recursos y problemas".
Dicho esto, ha pedido a los integrantes del Consejo Consultivo que dé consejos al Gobierno incluso antes de proceder a redactar las leyes o los decretos para "saber si estamos o no yendo por un camino correcto para no perder el tiempo, para ahorrar disgustos a la gente y que la gente tenga la conciencia tranquila de que sus instituciones funcionan conforme al sentido común y el derecho", ha afirmado.
"Es un servicio público que vela por lo que le interesa a la gente de verdad. Aquí sí que hay interés general y no hay ningún tipo de interés distinto", ha sentenciado el presidente autonómico, quien ha esperado que el Consejo siga trabajando como hasta ahora cumpliendo con su deber y haciéndose merecedor del "creciente prestigio" que tiene entre la propia clase jurídica y que celebra más que nadie.
Asimismo, ha insistido en el hecho de que a lo largo de su trayectoria el Consejo Consultivo no haya sido un órgano que haya generado ningún tipo de escándalo ni de controversia, no ya por sí mismo, sino en los nombramientos políticos o desde las instituciones.
Algo que el presidente regional ha achacado a la estabilidad que abunda en Castilla-La Mancha. "Aquí acordar, hablar, dialogar sigue estando bien visto, algo que resulta controvertido en buena parte del país".
De lo que se trata es de que el Consejo Consultivo trabaje para la gente ya que "es un órgano llamado --ha abundado--, a exigirnos humildad al conjunto de la administración, que genera una normativa tremenda".
Además, ha explicado que este órgano ayuda a que lo que salga del Parlamento regional sea conforme a la ley, algo que, en algunos casos, ha dicho, ha sido "pisoteado", poniendo como ejemplo los incidentes que se vivieron en España en los momentos previos de la convocatoria de un referéndum ilegal en Cataluña.
MENDIOLA CONFÍA EN NO DEFRAUDAR
De su lado, José Miguel Mendiola García, que ha prometido cumplir "fielmente" las obligaciones del cargo de consejero del Consejo Consultivo, ha dicho que espera "no defraudar" la confianza que se ha depositado en él.
"Los que me conocéis sabéis que podré errar, que erraré, espero también acertar. Pero de lo que no podéis tener dudas es que nunca haré dejación de mis funciones o eludir mi responsabilidad".
Ha recordado que comenzó hace muchos años en su actividad pública y profesional y siempre su trabajo ha estado dirigido a intentar, dentro de sus posibilidades, a que esta sociedad vaya avanzando "hacia una sociedad mucho más solidaria, libre y justa", ha dicho.
De su lado, el presidente del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha, Francisco Javier de Irízar Ortega, ha dado la bienvenida al nuevo consejero y ha resaltado que este acto de toma de posesión es un acto de "normalidad democrática" y de cómo funciona la región.
Ha afirmado que el órgano que preside no está para poner "pegas y dificultades" al Gobierno, sino para facilitar su labor desde la "lealtad". Esto no quiere decir --ha avisado-- que el Consejo Consultivo sea "sumiso" al Gobierno. "Cuando hay que decir que no, hay que decir que no" porque así se mejora el trabajo del Ejecutivo, ha concluido.