¿Podemos realmente dejar los miedos a un lado y lanzarnos a un negocio de manera segura y confiada?
Confía en profesionales
Lo primero que debes tener en cuenta es que, en un negocio como el del mercado inmobiliario, se necesita de la labor y la experiencia de un equipo experto. Si te embarcas solo en la tarea de alquilar tu piso, es probable que te dejes llevar por factores poco profesionales que repercutan, inconscientemente, en la idoneidad del elegido. Además, cualquier operación mercantil requiere de un conocimiento exhaustivo de la ley, que, como particular, probablemente no alcances.
Por eso, es imprescindible que cuentes con la ayuda de empresas que hagan todas las gestiones que conlleva un alquiler, así como de solucionar las posibles incidencias que surjan, para que tú no tengas que ocuparte (ni preocuparte) de nada. En Tentuka, con su servicio de Alquilamos tu inmueble, tendrás la mejor opción de alquiler rentable y sin riesgos.
Actuar con seguridad y firmeza: la clave del éxito
El equipo de profesionales se encargará de preparar un contrato. No lo olvides: la firma del contrato es uno de los momentos más importantes y especificar su tipo y las cláusulas principales determinarán, no solo los derechos de ambas partes, sino las obligaciones y los puntos que puedes exigir en caso de incumplimiento. Nunca dejes que tu miedo a alquilar o tus inseguridades venga acompañada de la precipitación o la impericia: no realizar una correcta Gestión integral de arrendamientos conllevará a acrecentar el riesgo de problemas que pueden derivar en situaciones muy perjudiciales de impagos y daños.
Reivindica tus pagos
Los impagos de las cuotas son acciones a las que debes enfrentarte cuanto antes: puedes negociar con tu inquilino, pero un burofax reclamando la deuda no es ni costoso ni complejo, mucho menos si estás bien asesorado. Además, si llegado el plazo de 30 días y tu inquilino no paga, no renuncies a lo que te pertenece e inicia los trámites judiciales mediante la interposición de una demanda.
También es importante que los Abogados de derecho de seguros te informen de la posibilidad de suscribir un seguro de inquilinos que, si bien la ley no lo exige, es más que útil para cubrir, aparte de la responsabilidad frente a terceros, algunos gastos como los derivados por robo, por aguas, por averías eléctricas o imprevistos o accidentes como roturas de ventanas o cristales.
Los insumos
Los gastos de suministros (agua, luz, gas…) y comunitarios se determinan en el contrato de alquiler, pero, por lo general, suelen ir a cuenta de tu inquilino. Confía en profesionales como Usanca expertos en consumos energéticos, para que la monitorización y la contabilización de los gastos sea siempre fiel y correcta, evitando cualquier reclamación.
Como ves, la confianza y la seguridad son fáciles de ganar si refuerzas tu postura de propietario con un equipo de profesionales adaptado y que te suponga la tranquilidad y la garantía, no solo del mejor asesoramiento, sino de cobrar lo que legalmente te corresponde mediante un contrato de arrendamiento adaptado a derecho y, sobre todo, a ti.
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