Los hechos ocurrieron la tarde del día 7 de noviembre, cuando la patrulla en servicio, en ejercicio de cometidos de vigilancia de carreteras y control de la velocidad estático, detectaron un vehículo con matrícula española que circulaba superando los límites de velocidad establecidos reglamentariamente, circulando a 215 km/h por la autopista AP-36 (Ocaña-La Roda) en el término municipal de San Clemente (Cuenca), cuando la velocidad estaba limitada a 120 km/h.
Según ha informado en nota de prensa el instituto armado, al circular el vehículo a gran velocidad, no pudo ser interceptado por la patrulla de servicio, siendo identificado con posterioridad por el Grupo GIAT del Subsector de Tráfico de la Comandancia de Cuenca, tratándose de un vecino de la localidad de Alicante, circunstancia por la cual se solicitó la colaboración del Grupo GIAT perteneciente al Subsector de Tráfico de la Comandancia de Alicante, los cuales procedieron a la investigación del conductor del vehículo implicado en los hechos.
Dicho conductor podría enfrentarse a penas que oscilan entre los tres a seis meses de prisión o la de multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días y en cualquier caso a la de privación del derecho a conducir vehículo a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.