No hay problema: para eso están las alfombras de pelo corto a medida, que podrás configurar al centímetro exacto con una enorme variedad de colores y texturas.
Y si finalmente te puede servir una medida estándar, también hay infinidad de modelos a tu disposición. Con medidas pequeñas para dormitorios o grandes para salón.
Pero, ¿qué te ofrece una alfombra de pelo corto frente a una lisa o de pelo largo? ¿En dónde la podemos colocar y cómo le sacaremos el mejor partido?
Alfombras de pelo corto, en el punto medio entre practicidad y decoración
Cuando elegimos alfombra hay dos aspectos que a veces están enfrentados: lo práctico, por un lado, y lo acogedor y decorativo por otro.
Pues las alfombras de pelo corto a medida (o de medidas estándar) aportan un equilibrio muy interesante entre estos dos aspectos, lo cual es muy interesante para definir una buena alfombra de salón, por ejemplo.
Lo práctico requiere alfombras lavables y fáciles de mantener, mientras que lo acogedor necesita alfombras hogareñas, mullidas y con un tacto que la mano o el pie descalzo puedan apreciar de manera gustosa y suave.
Qué duda cabe que las alfombras de pelo largo son exuberantes y superacogedoras, pero en contra tienen su mantenimiento complicado y su tendencia a acoger suciedad y polvo (muy especialmente si hay mascotas en casa).
Y las alfombras sin pelo son más duras al tacto y no tienen la calidez para decorar como solo una alfombra con pelo puede ofrecer.
Por eso las alfombras de pelo corto encuentran su hábitat en ambientes en las que las de pelo largo resultan excesivamente abrumadoras o expresivas (que de eso también se puede pecar por exceso).
Y en aquellos en los que las alfombras con superficie lisa resultan demasiado austeras o insulsas.
Qué nos ofrece una alfombra de pelo corto
En primer lugar, que representan lo mejor de ambos mundos, ya que no tienen los inconvenientes de las alfombras de pelo largo, y a la vez son más hogareñas que las de superficie lisa.
Eso revierte directamente en su facilidad de limpieza, ya que la mayoría de las veces una simple pasada con el aspirador las dejará como nuevas.
También las alfombras de pelo corto nos ofrecen un tacto a la pisada más agradable y acogedor frente a una alfombra sin pelo. Incluso en las de pelo más corto, el pelo siempre está ahí y eso siempre se percibe.
Las hay de pelo cortísimo, de apenas unos pocos milímetros de grosor, como las confeccionadas con viscosa o polipropileno. Las hay estampadas, pero también de colores lisos para decorar con el color.
Pero sin llegar a eso hay alfombras de pelo corto de menos de 1 cm de grosor a las que sacarás un excelente partido
como alfombras de salón, de recibidor o de dormitorio sin complicaciones de mantenimiento a la vez que mantienes la decoración cálida y hogareña.
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