La Diputación de Albacete activó un operativo de emergencia tras una intensa tormenta de granizo en La Roda, que causó significativos daños materiales. Con 14 profesionales y equipos especializados, se realizaron rescates y limpieza de inundaciones. El presidente Santi Cabañero destacó la rápida respuesta para garantizar la seguridad de los vecinos.
Desde ayer, una respuesta rápida, coordinada y eficaz ha sido desplegada por la Diputación Provincial de Albacete a través del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento (SEPEI). Esta acción fue necesaria debido a la severa tormenta de granizo que golpeó La Roda durante la tarde del domingo, provocando daños materiales significativos y situaciones de emergencia que exigieron una intervención inmediata.
Se ha llevado a cabo un operativo de emergencia que ha movilizado un total de 14 profesionales, incluyendo dos dotaciones completas de bomberos desde La Roda y una más desde Villarrobledo. Estos equipos están apoyados por tres camiones especializados y dos vehículos de mando.
Durante las primeras intervenciones, los equipos lograron rescatar a dos personas mayores en situación de riesgo. Además, se han realizado tareas críticas como la limpieza de ramas caídas en las calles principales y el achique de agua en garajes y sótanos inundados, labor que continúa en la actualidad.
Esta misma mañana, el presidente de la institución provincial, Santi Cabañero, ha destacado que "nuestros profesionales continúan trabajando activamente en la zona para garantizar la seguridad de los vecinos y acelerar el proceso de normalización". Cabañero se ha desplazado al área afectada para evaluar los impactos de la tormenta y coordinar la respuesta de los servicios provinciales, quienes están colaborando estrechamente con el personal municipal y la Policía Local. Además, ha querido manifestar su apoyo a todos los vecinos y vecinas de La Roda, "especialmente a quienes han sufrido daños materiales a causa de esta inesperada tormenta". También ha expresado su agradecimiento al conjunto de servicios de emergencia por "su rápida actuación" para evitar que las consecuencias "fueran peores".
Una intensa tormenta azotó la región durante cerca de 20 minutos, dejando caer hasta 70 litros por metro cuadrado. Además, el granizo alcanzó un tamaño considerable, con piedras de hasta 4 centímetros de diámetro. Este fenómeno meteorológico causó inundaciones en las calles del municipio, donde los niveles de agua llegaron a alcanzar hasta 50 centímetros. Como resultado, se produjeron daños en vehículos, viviendas y comercios, así como en el patrimonio local y una notable destrucción del arbolado urbano.