La mala relación entre los dos concejales de Ganemos-IU en Hellín pone en peligro la estabilidad en el Ayuntamiento

que parecen tener desde hace algunos meses, alcanzaron en el Pleno de este lunes su punto álgido confirmándose con la opinión pública, por parte de Jiménez tras finalizar la sesión plenaria, ya que Javier Morcillo, públicamente, solicito al alcalde que se plantee si Beatriz Jiménez merece seguir al frente de la Concejalía de Educación, después de que ésta se ausentase del salón, en pleno debate de la Moción del Partido Popular apostando por la continuidad de la escuela concertada.

 El hecho fue en un momento de la primera intervención de Manuel Mínguez, portavoz del PP, cuando Beatriz Jiménez abandono el escaño que ocupa en el Salón de Plenos del Ayuntamiento-junto al de Javier Morcillo-y se marchó, hasta que regresó en la recta final del debate.

En ese momento, el propio Morcillo tomó la palabra para asegurar que este debate educativo resultaba «incompleto», desde el momento en que la máxima autoridad en Educación- en alusión a la concejala-no se encontraba presente, lo que consideró una falta «muy grave», por lo que el ambiente tenso que se mascaba en las últimas semanas entre ambos, terminó por estallar cuando aquél le propuso al alcalde que estudie la conveniencia de mantener a Jiménez al frente de la Concejalía.

Al final del Pleno, Jiménez convocó a lo medios de comunicación para aclarar lo sucedido, que tuvo su punto de partida cuando, reveló, que hace unos días se puso en contacto con el nuevo coordinador de la Asamblea Local de IU, para conocer quién, en el futuro, se va a encargar de defender las mociones que se debatan en el Pleno.

Tras conocer que la asamblea ha decidido que sea Morcillo quien lleve la voz cantante de IU en las mociones que se planteen en el futuro, Beatriz Jiménez, avisó que «es el momento de reflexionar seriamente qué es lo que sucede ahora en IU y en anteriores legislaturas porque-prosiguió- todos los concejales se tienen que marchar»-en clara alusión, por ejemplo, a lo que sucedió con elanterior edil de IU, Juan Carlos Marín.

Acerca de su posible marcha de IU tras este incidente, aseguró de manera tajante que no se le pasa por la cabeza renunciar, al recordar el día en que llegó a las filas del partido, en busca de una renovación que «se ha visto salpicada de muchos problemas», aunque reivindicó logros que ha conquistado en el tiempo que estuvo al frente de la Coordinación, como el pacto de Gobierno con el PSOE tras las elecciones de mayo el año pasado, «a pesar que IU está dividida. Y lo peor-dijo- es que no se ve una solución a corto plazo y a alguien capaz de encauzar un buen debate, porque, las asambleas son muy reducidas» Lamentó que en su etapa de coordinadora, que dejó cuando se le concedió la baja laboral, no pudo unir a las personas de izquierdas, porque, es evidente que existen problemas internos que no son convenientes debatirlos en los medios, tras asegurar que «no voy a consentir presiones de nadie, porque, voy a seguir fiel a las siglas con las que me presente a las elecciones», apostillando «no voy a permitir que nadie ponga en tela de juicio mi trabajo al frente de la Concejalía de Educación».