El fiscal pide diez años y medio de prisión para R.C.C.L. y la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de la joven durante diez años.
Los hechos que juzgará mañana la Audiencia de Toledo se remontan a abril de 2013 cuando el acusado contactó por whatsaapp con una adolescente de quince años con la que había mantenido una relación desde julio de 2012 hasta enero de 2013.
En el mensaje dijo que tenía varios vídeos íntimos de ella que haría públicos si no mantenían relaciones sexuales una vez a la semana, lo que la menor hizo desde el 30 de abril hasta el 20 de mayo "ante el temor" de que el acusado lo hiciera, según el fiscal.
Los mensajes de R.C.C.L. eran continuos, en ocasiones más de 50 un mismo día, lo que provocó en la joven "una situación de temor y angustia" que le impedía negarse a las pretensiones.
Además, las veces en que se mostró reticente a acudir al domicilio del hombre este la amenazó con los vídeos y con "daños" que iban a sufrir su familia y amigos si no accedía.
Según el ministerio público, el proceso "consiguió anular la voluntad" de la joven, que actuaba por el temor a que se cumplieran las amenazas.