El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero, destacó que la prevención es clave en la estrategia contra incendios, con una inversión anual de 116 millones de euros. A pesar de los esfuerzos, advirtió sobre el riesgo de incendios graves y subrayó la importancia de la preparación y cooperación para proteger el medio ambiente.
El vicepresidente segundo del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero, ha afirmado que el eje central de la estrategia de Castilla-La Mancha para combatir los incendios forestales es la prevención, a la cual se asignan anualmente 116 millones de euros.
En Pozuelo de Calatrava, antes de iniciar la tercera etapa de la Vuelta Ciclista a Castilla-La Mancha, Caballero respondió a las preguntas de los periodistas. Detalló que gran parte de la inversión se enfoca en las labores previas a la campaña de verano, las cuales incluyen tareas de limpieza, mantenimiento y vigilancia. Estas acciones son fundamentales para disminuir el riesgo y proporcionar una mayor seguridad a la población.
No obstante, el vicepresidente ha señalado que, a pesar de los recursos disponibles, "nadie está exento de sufrir un incendio grave", puesto que en ocasiones la naturaleza se impone.
Caballero ha enfatizado que "lo importante es haber hecho los trabajos antes y estar preparados". Está convencido de que la anticipación y la profesionalización del personal constituyen la mejor garantía frente al incremento de las temperaturas y los efectos del cambio climático.
En este contexto, se ha mencionado que la comunidad autónoma dispone de un equipo compuesto por 2.800 hombres y mujeres, así como de aproximadamente 300 medios terrestres y aéreos. Estos recursos, respaldados por la más avanzada tecnología, se movilizan durante los meses más críticos del año.
Caballero ha destacado que en la última década se ha observado un cambio "espectacular" en la forma en que están organizados, así como en los recursos y las condiciones de trabajo de los bomberos forestales. Este avance se debe a la estabilidad de los contratos a lo largo del año y a la implementación de nuevas tecnologías para la extinción de incendios.
Respecto a las reivindicaciones sindicales a nivel nacional, el Gobierno regional ha afirmado que sigue manteniendo un diálogo abierto. Sin embargo, también ha subrayado que Castilla-La Mancha se posiciona como una de las comunidades que mejor ha proporcionado estabilidad y recursos a sus profesionales.
En otro contexto, el vicepresidente ha expresado su preocupación por cómo, en ciertas ocasiones, los incendios se transforman en "incendios políticos", lo que provoca un enfrentamiento entre partidos e instituciones. Según él, la cooperación para proteger el medio ambiente y asegurar la seguridad ciudadana debería ser la verdadera prioridad.
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