Ya sea poner césped artificial en la terraza, comprar una alfombra persa azul para el recibidor o cambiar la lámpara del comedor por una cesta de mimbre, en mayor o menor medida, todos hemos hecho algunos cambios.
¿Qué nos ha llevado al boom de las reformas y la decoración?
Podríamos decir que el motivo principal de querer reformar o redecorar nuestras casas es que hemos pasado mucho tiempo sin poder salir de ellas. Y es cierto. Estar tiempo en casa nos ha permitido detectar "carencias" en las que antes no habíamos reparado como, por ejemplo, darnos cuenta de lo desaprovechada que teníamos la terraza, del poco espacio que teníamos para trabajar con un ordenador o de la necesidad de acristalar el balcón para tener más espacio para jugar con los niños en casa. Pero esta motivación, que podríamos llamar funcional (estaba bien para hacernos la vida encerrados más sencilla), no es la única que nos ha llevado al boom de las reformas y decoración.
Otro de los motivos ha sido el tiempo libre. Con unos cuantos millones de trabajadores y trabajadoras en ERTE, muchos de nosotros encontramos una salida al aburrimiento y una opción para tener la mente ocupada recuperando proyectos de bricolaje. Aquella mesa desencolada, una pared por repintar, el plato de ducha que siempre quisimos poner... El confinamiento fue el mejor momento para continuar o empezar pequeñas mejoras en casa.
Y, sin duda, otro motivo poderoso que nos ha llevado a plantearnos mejoras en casa ha sido el hecho de estar todos los días viendo las casas de los demás. Bien fuese en las reuniones de trabajo por Zoom, en las noticias viendo a la mujer del tiempo dando la predicción desde su salón o en redes sociales de famosos y no tan famosos grabando vídeos y haciéndose fotos, en 2020 nos hemos hartado de ver casa, salones, cocinas y terrazas. Además, quienes tenían casas para presumir, no se lo pensaban y publicaban sus pequeños rincones de ensueño donde olvidarse de la situación que se estaba viviendo de puertas para fuera, convertidos en auténticos influencers del diseño de interiores.
Un sector que venía muy castigado de la crisis de 2008 empezó a levantar cabeza el último trimestre de 2020 con un aumento de demanda de servicios de reformas sin precedente desde hacía varios años. Por no hablar del aumento de demanda de cierto tipo de viviendas para los que no se conforman con un lavado de cara y buscan más exteriores, menos vecinos y una vida más tranquila. Tienda de pinturas.
En definitiva, tras la pandemia nos hemos dado cuenta de lo importante que es vivir en una casa cómoda y hemos aprendido a valorar los momentos que pasamos en ella con nuestros seres queridos. Tras este episodio, vamos a tener casas con las que estemos más contentos y en las que querremos pasar más tiempo ya sea solos, en pareja, en familia o con amigos.
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