Todas ellas vecinas de la localidad almeriense de Roquetas de Mar, de 48, 46 y 45 años respectivamente, como presuntas autoras de los delitos de estafa (modalidad conocida como CEO con la variante del Business E-Mail Compromise), falsificación de documento privado, blanqueo de capitales, descubrimiento y revelación de secretos y pertenencia a grupo criminal.
Las investigaciones comenzaron en el mes de octubre del año 2021, cuando el responsable de una empresa denunció ante la Guardia Civil de Tarazona de la Mancha que podía haber sido víctima de una estafa. El denunciante reclamó el pago de una factura a una empresa de Madrigueras con la que mantenía relaciones comerciales, manifestándole sus responsables que le habían transferido el importe convenido al nuevo número de cuenta que les habían facilitado por correo electrónico. Dado que este correo no había sido enviado por su empresa, se percató que podría ser víctima de una estafa.
Fruto de las gestiones realizadas por los agentes de la Benemérita se pudo averiguar la identidad de los tres autores de los hechos investigados, comprobando como el cabecilla del grupo criminal desmantelado había utilizado, de manera fraudulenta, la dirección de correo electrónico del denunciante para que, mediante la modificación del número de cuenta de abono de la factura, se le realizase una transferencia de dinero por valor de más de 26.000 euros, ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.
Tras recibir el dinero, el detenido realizó dos transferencias, de 1.000 euros cada una, a las cuentas bancarias tanto del otro detenido como del investigado, que hacían el papel de "mulas económicas", utilizadas únicamente para darle salida legal al dinero estafado.
La rápida actuación de los agentes encargados de las investigaciones permitió bloquear la cuenta bancaria del cabecilla y recuperar más de 24.000 euros de los 26.000 estafados que todavía no había transferido.
Este tipo de estafa consiste en que un ciberdelincuente, mediante engaño, se hace pasar por el director general o por un alto cargo ejecutivo de una organización o empresa y envía un e-mail al empleado o responsable económico de otra, con la intención de que realice transferencias no autorizadas o envíe información comprometida de la empresa.
Las diligencias policiales, instruidas por el Equipo de la Benemérita albaceteña, han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción de la localidad de Casas Ibáñez.
RECOMENDACIONES
No abrir nunca enlaces desconocidos y verificar siempre que tanto el remitente como la dirección del correo se corresponda con el dominio oficial de la compañía. A veces los delincuentes varían una sola letra o un signo de la dirección de correo legítima.
En algunas ocasiones los correos o mensajes recibidos están mal redactados y contienen numerosas faltas de ortografía, fruto de que han sido traducidos directamente y los cibercriminales no hablan nuestro idioma.
Es conveniente tener una contraseña robusta en las cuentas de correo electrónico, tanto a nivel empresarial como particular, a fin de que sea más difícil obtener las credenciales de acceso por parte de los ciberdelincuentes.
Si como empresa recibe un correo electrónico de algún cliente modificando el número de cuenta bancaria habitual, pónganse en contacto con la persona que tiene que recibir el dinero para corroborar el cambio de cuenta, y si no se percata en ese momento, proceda a denunciarlo lo antes posible antes las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para evitar la posible estafa e intentar recuperar el dinero estafado.