Los senderistas conocieron la ruta denominaba “Valle del río Cabriel”, con una dificultad técnica alta, un recorrido lineal de unos 12 kilómetros de distancia y cuatro horas de duración.
La mañana aparecía cubierta, aunque con agradable temperatura para el senderismo, tomarían café en el municipio para luego desplazarse en dos microbuses a Los Cárceles, debido a que la carretera de acceso es poco recomendable para un autobús de mayores dimensiones.
Los Cárceles, una pedanía de Villamalea asentada a las orillas del Río Cabriel limitando con la provincia de Cuenca y Valencia, declara Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 2019.
Arrancarían desde el mirador de Los Carceles, junto a la carretera, para bajar primero por pista y luego por senda aguas arriba del río Cabriel, hasta llegar al Reguero Pozico.
Poco a poco irían cogiendo altura, rodeados por distintas formaciones rocosas y una gran diversidad de especies de bosque mediterráneo como pino, romero, esparto, coscoja y pinos. Cruzarían este reguero y comenzaría una importante subida de 200 metros por una senda hasta el camino del Corral de Don Pepito, el cual cogerían, ya de vuelta, de nuevo a Los Cárceles, junto al río, en el que pudieron comprobar la gran cantidad y la velocidad del agua que llevaba, ya que habían abierto la presa que lo alimenta, lugar que aprovecharon para tomar un tentempié, cortesía del Ayuntamiento de Villamalea.
Cogerían ahora aguas abajo en dirección al molino Abellán, durante 2,5 kilómetros que discurre paralelo al río, atravesando una zona de huertas donde se cultivan gran variedad de productos hortícolas en estas tierras de grandes riquezas regadas por las aguas del Cabriel. Pasarían también por los restos de un viaducto de la antigua y nunca utilizada vía Baeza-Utiel, una infraestructura de gran altura que cruza el río de una orilla a otra, aunque está sin concluir y no se puede atravesar.
Continuarían pegados al río, hasta una zona de rápidos, donde el agua bajaba a gran velocidad, una preciosa zona rodeados de vegetación típica de ribera. Dejarían el camino para comenzar por senda, una gran pendiente que sube hasta la parte más alta de la montaña, donde pudieron contemplar unas fantásticas vistas, durante su recorrido, los meandros del Río Cabriel, y del valle que forma. Irían cresteando hasta llegar a la roca de Los Cárceles, donde pudieron contemplar esta pedanía y el río que lo atraviesa, el viaducto por el que pasaron y un fantástico paisaje de todo el valle del Cabriel. Ya sólo les restaba descender de nuevo hasta el mirador de Los Cárceles de donde partieron.
Al llegar al municipio pudieron visitar las fantásticas instalaciones de la cooperativa Naturvilla, dedicada al cultivo del champiñón.
Una fantástica mañana, con una preciosa ruta, que hizo disfrutar a los cincuenta participantes de esta actividad, de las maravillas de entornos naturales que esconden nuestros municipios, gracias a la iniciativa de la Diputación Provincial de Albacete.
El próximo fin de semana, habrá un parón debido a la Semana Santa. Ya se retomarán las rutas el fin de semana siguiente 6 y 7 de abril, en Casas Ibáñez y Alatoz respectivamente.
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