El Gobierno de Castilla-La Mancha está diseñando la futura Agenda de Desarrollo Urbano y Rural (ADUR) de la Sierra de Alcaraz – la primera que se va a llevar a cabo en la provincia de Albacete – y que supondrá una herramienta más en la lucha contra la despoblación.
Así lo ha trasladado el viceconsejero de Planificación Estratégica, José Antonio Carrillo, durante la reunión con los miembros de la Asociación Grupo de Desarrollo Rural de la Sierra de Alcaraz y el Campo de Montiel (SACAM) para abordar los ejes centrales de la ADUR que nace con la intención de conocer más a fondo las necesidades concretas del territorio, “lo que nos permitirá tomar medidas singulares y específicas teniendo en cuenta la realidad de cada zona”.
Estas ADUR son, tal y como ha explicado Carrillo, “un documento que queremos consensuar con todas las administraciones implicadas, concretamente las Diputaciones Provinciales y los Ayuntamientos, y también con el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana”.
Durante el encuentro, -- en el que ha participado el presidente de Recamder (Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural), Jesús Ortega; además del presidente SACAM, Gregorio Moreno; y su gerente, José Zalve—el viceconsejero ha subrayado que las Agendas de Desarrollo Urbano y Rural son un instrumento más que el Ejecutivo autonómico va a desarrollar a lo largo de esta legislatura con el objetivo de “acercar la lupa” ante la realidad de los territorios afectados por la despoblación en la Comunidad Autónoma.
La de la Sierra de Alcaraz es una de las 26 que en total se van a llevar a cabo en la región en colaboración con Recamder coincidiendo con la primera revisión de la Estrategia Regional frente a la Despoblación prevista para el 2025.
En este sentido, José Antonio Carrillo ha insistido en que el diseño de esta ADUR de la Sierra de Alcaraz se complementará con las actuaciones que el Ejecutivo autonómico viene desarrollando en el marco de la Ley y la Estrategia Regional frente a la Despoblación y que se está traduciendo en un incremento de saldo positivo de habitantes en el territorio autonómico en general, y en esta zona, en particular, que arroja un saldo migratorio positivo cercano a 400 personas.