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Tres funcionarios, uno de ellos de Albacete, aceptan un año de cárcel por traficar con datos personales

lunes 07 de noviembre de 2016, 15:53h

Tres funcionarios de la Seguridad Social de Sant Feliu de Llobregat (Barcelona), Albacete y Zaragoza han aceptado hoy trece meses de prisión y seis de inhabilitación por filtrar datos personales y laborales de trabajadores y empresas a agencias de detectives que las vendían posteriormente.

En la sección 21ª de la Audiencia de Barcelona estaba previsto hoy el juicio contra nueve presuntos miembros de la trama dedicada al tráfico de datos personales, de la que además de los tres funcionarios formaban parte detectives y responsables de empresas que vendía información personal.

Los nueve acusados, que afrontaban condenas de hasta cinco años de prisión, han aceptado trece meses de cárcel por delitos continuados de descubrimiento y revelación de secretos -y seis de inhabilitación en el caso de los funcionarios-, al beneficiarse de la atenuante de dilaciones indebidas, dado que la causa estuvo encallada en los juzgados entre los años 2002 y 2004 y entre 2011 y 2013.

La Fiscalía ha aceptado rebajar su petición de condena a cambio de que los procesados acepten los hechos y se conformen con 13 meses de prisión, pena que el ministerio público pide que les sea suspendida para que no tengan que ingresar en la cárcel, dado que carecen de antecedentes penales.

Según el relato de hechos que se plasmará en la sentencia de conformidad, tres de las procesadas crearon en 1994 una empresa en Esparreguera (Barcelona), llamada Finiform, que vendía informes sobre personas físicas y jurídicas en los que se hacía constar también el domicilio y su lugar de trabajo.

A sabiendas de que los datos serían obtenidos fraudulentamente a través de la Seguridad Social, las procesadas se dirigían para conseguirlos a las empresas Detectives Domar S.L y Barcelona Informa S.L., vinculadas a otros tres acusados, así como a un funcionario de la Dirección Provincial del Instituto de la Seguridad Social en Zaragoza.

Las empresas de detectives vendían a la empresa Finiform datos personales que obtenían a través de un funcionario del Centro de Atención e Información de la Seguridad Social de Almansa, correspondiente a la Dirección Provincial de Albacete, y de otro que trabajaba en la administración de la Seguridad Social en Sant Feliu de Llobregat.

A lo largo del año 2002, los funcionarios procesados utilizaron su clave de usuario para acceder a datos personales de la Seguridad Social de numerosas personas, lo que incluía la filiación, así como información laboral y de cotizaciones.

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