En la inspección practicada por los agentes, se comprobó que la mayoría de los animales no estaban correctamente identificados con trasponedor electrónico (microchip) y además no le habían sido suministradas las vacunas obligatorias exigidas en Castilla La Mancha, según ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.
La instalación no presentaba libro de registro y no estaba dada de alta como núcleo zoológico. Asimismo, las condiciones higiénico sanitarias eran muy deficientes.
La actuación se ha saldado con la constatación de numerosas infracciones y la denuncia de la titular de los animales ante las administraciones competentes.