Christian Kofane es el nuevo jugador del Bayer Leverkusen, tras ser traspasado por el Albacete Balompié en la operación más cuantiosa de su historia, superando los cinco millones de euros. Su meteórico ascenso en solo diez meses destaca su talento, dejando un legado positivo en el club.
El culebrón del verano ya tiene desenlace: Christian Kofane ya es nuevo jugador del Bayer Leverkusen. El Albacete Balompié ha oficializado este jueves el acuerdo alcanzado con el conjunto alemán para el traspaso del joven delantero camerunés, que se convierte en la venta más cuantiosa en la historia del club manchego.
Los términos finales de la operación, según ha confirmado el propio club, superan la cláusula de rescisión que figuraba en el contrato del jugador. La cifra exacta no ha trascendido, pero distintas fuentes la sitúan por encima de los cinco millones de euros, casi el doble de lo ingresado por el traspaso de Pablo Ibáñez en 2004, hasta ahora la operación más destacada en el capítulo de salidas.
Un meteórico ascenso
La historia de Kofane con la camiseta blanca es tan breve como fulgurante. Apenas diez meses después de aterrizar en Albacete procedente de la academia AS Nylon de Camerún, gracias a un convenio de colaboración, el delantero ha dado el salto a uno de los clubes más potentes de la Bundesliga, reciente campeón de liga y participante habitual en la Champions League.
Tras deslumbrar con el juvenil de División de Honor —donde anotó seis goles en seis partidos—, Kofane debutó con el primer equipo el 11 de enero de 2025 en un partido frente al Racing de Santander. Lo hizo como titular, y no necesitó más que un toque para dejar su huella: gol en el primer balón que tocó. Desde entonces, disputó otros 19 encuentros en Segunda División y firmó un total de ocho tantos que fueron fundamentales en la lucha por la permanencia del equipo.
Interés creciente y una salida polémica
Su rendimiento no pasó desapercibido para clubes de primer nivel. Varios equipos ingleses y alemanes se interesaron por su situación, aunque fue el Bayer Leverkusen el que apostó más fuerte por él. Las negociaciones no estuvieron exentas de tensión: en los últimos días, Kofane no acudió al reconocimiento médico del Albacete y llegó incluso a entrenarse por su cuenta en una escuela local sin el permiso del club, un gesto interpretado como una forma de presión para acelerar su salida.
Pese a ello, la entidad manchega ha optado por destacar el legado positivo del jugador. En su comunicado oficial, el club asegura que, aunque consideran que el Albacete era "el mejor equipo posible" para seguir desarrollando su potencial, desean al jugador "el mayor de los éxitos" en esta nueva etapa y le recuerdan que "las puertas del Carlos Belmonte siempre estarán abiertas".
Una operación histórica
La venta de Kofane no solo supone un hito económico para el Albacete, sino también una gran oportunidad para reforzar su plantilla con vistas a la próxima temporada. Parte de los ingresos irán también a la academia camerunesa AS Nylon, como parte del acuerdo de formación entre ambas entidades.
El nombre de Christian Kofane ya está inscrito en la historia del club. Llegó como una joven promesa y se va como la mayor venta del Albacete Balompié. Breve, pero inolvidable.
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