Cabo, de 21 años y natural de Guadalajara, fue sustituido en la segunda mitad debido a un golpe en una rodilla y tras acabar el encuentro ante La Solana "se metió en hielo y, después, siguió tratándose con el fisioterapeuta", ha explicado el preparador roblense.
Una hora después de acabar el choque, el jugador se encontraba en el vestuario con el fisioterapeuta y el utillero cuando, de repente, comenzó a "temblarle la pierna golpeada y, seguidamente, desplomarse para atrás y convulsionar", ha explicado Castellanos.
El extremo del club rojillo fue trasladado en ambulancia al Hospital de Villarrobledo, donde, tras someterle a las primeras pruebas, se especuló con que "podía ser una hipertrofia ventricular, según los médicos", ha declarado su entrenador.
Castellanos ha apuntado que el jugador podrá recibir hoy el alta, pero el jueves se someterá a un "examen profundo" para detectar las causas de lo ocurrido y, en todo caso, no volverá a entrenar hasta que se descarte cualquier problema físico.
Tanto Castellanos como la familia del joven, el club y sus compañeros son "optimistas" por la evolución del chico, ha dicho el técnico.